Una vez ha atacado o lanzado hechizos 4 veces, Pantheon bloquea el siguiente ataque básico o de torreta que recibe.
Tiro de Lanza
Alcance: 600
Enfriamiento: 4 segundos
Costo: 45 de Maná
Pantheon arroja su lanza a un rival, que sufre 75/110/155/195/235 (+140% Daño de Ataque adicional) de daño físico.
Égida de Zeonia
Alcance: 600
Enfriamiento: 13/12/11/10/9 segundos
Costo: 55 de Maná
Pantheon se abalanza sobre el enemigo objetivo, le inflige 60/85/110/135/160 (+100% Poder de Habilidad) de daño mágico y lo aturde durante 1 seg. Además, restablece instantáneamente su Égida Protectora.
Golpe Buscacorazones
Alcance: 400
Enfriamiento: 10/9/8/7/6 segundos
Costo: 45/50/55/60/65 de Maná
Pasiva: Los ataques básicos de Pantheon y la habilidad Tiro de Lanza aumentan un 100% las probabilidades de asestar golpes críticos contra objetivos con menos de un 15% de Vida.
Activa: Pantheon se concentra y asesta 3 golpes rápidos delante de él, que infligen 100/150/200/250/300 (+300% Daño de Ataque adicional) de daño físico (inflige 60% de daño a súbditos y monstruos).
Daño por golpe: 60% Daño de Ataque adicional
Gran Descarga Celestial
Alcance: 5500
Enfriamiento: 150/135/120 segundos
Costo: 100 de Maná
Pantheon reúne sus fuerzas y, luego, salta muy alto. Segundos después, impacta contra la zona objetivo. Inflige un máximo de 400/700/1000 (+100% Poder de Habilidad) de daño mágico a los enemigos del centro (hasta 50% a los de los extremos) y ralentiza su velocidad de movimiento un 35% durante 1 segundo.
Si Pantheon cancela este canal, Gran Descarga Celestial tiene un enfriamiento de 30 seg.
Historia de campeón
El guerrero incomparable conocido como Pantheon es un modelo en las batallas, casi imparable. Nació entre los Rakkor, una tribu guerrera que habita las laderas del Monte Targón, y luego de escalar la traicionera cumbre de la montaña y ser considerado digno por esta, lo eligieron para convertirse en la encarnación terrenal del aspecto celestial de la guerra. Pantheon, imbuido con poder inhumano, busca incansablemente a los enemigos de Targón, dejando nada más que cadáveres a su paso.